lunes, 17 de junio de 2024

Salir de cualquier modo

“Viento fuerte del mar, deja deja ya de soplar, déjame respirar solo por un momento…” (Vicentico)

Pantanito tan insistente, ya es hora de que me sueltes… “voy a salir de cualquier modo”... Tengo que tomar un rumbo diferente una vez más, volver a descansar, estoy nueva y definitivamente agotada. Estos y los otros, gentecita tan inoportunamente dañina… Y yo, yo como normalmente, cayendo.

La rememoración me está carcomiendo, ¿qué maldita manía de recordar?, la memoria es una lápida viviente, ¡qué fastidio! Elaborar y elaborar, reinventar mundos que ya no existieron y jamás existirán, imaginar pasados y futuros forzados que están más allá de cualquier realidad y más acá de todo tormento.

Y mis sueños persistentemente seductores, perennemente asustadores. Correr, esconderme, perder… Luchar, entrenarme, ganar. Eternamente abismos, calles y ferrocarriles mortales… monstruos, asesinos, batallas… miedo, oscuridad, incertidumbre… muerte y resurrección… viajes entre universos… extrañeza… poder.

¿Qué es lo que quiero? ¿En verdad quiero algo? ¿En verdad quiero a alguien? Y si quiero a alguien o a algo… ¿cómo es que lo quiero? ¿Qué hay dentro de mí? ¿En qué plano está mi auténtico existir? ¿Existe el destino? Y si existe… ¿Cuál es el mío? “¿Cuál es aquel camino que tengo que tomar?”.